Hay cosas que son tan de cajón
que nos pillamos los dedos:
que si te salvas ahogando, te sentencias;
que devolver es también vomitar,
y hay cosas que siempre darán mucho asco.
Como salir volando
para encontrarte las cosquillas
y aterrizar
diciéndonos bajito que ha dejado de llover
y que si yo me tiro, por favor no te tires
que morir aplastada
también es dejar de ser.
Mentir por confusión
que yo a ti nada
que con tantos frentes abiertos
he cogido frío
y melancólica de un "nos quiero"
me resbalé y me caí entre las ramas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario